Diploma de Especialización en DJ & Music Producer

“Un empresario de este sector prefiere contratar a un profesional que tenga formación
especializada que a alguien autodidacta”

El sector de la producción musical está cambiando a pasos agigantados. Y el sector demanda, cada vez más, profesionales especializados y formados en las nuevas tecnologías. Aprovechando que en enero arrancamos el nuevo programa de FP++ de DJ & Music Producer, hablamos con Jordi Carreras, de Plastic Academias, toda una referencia en el sector y una de las figuras más importantes en el desarrollo de contenidos de este nuevo curso.

Arrancamos nuevo programa FP++ de DJ & Music Producer. ¿Qué se van a encontrar los alumnos en esta formación?

Una gran formación con valiosas asignaturas que han sido elaboradas desde el más estricto conocimiento en cada una de sus unidades. Se trata de un curso muy completo, quizás, el más amplio del mercado en el desarrollo de la profesión del DJ y del productor en todas sus facetas. Lo interesante es que los alumnos verán en profundidad todo lo necesario para entrar en la industria de la música electrónica con plenas garantías. Seguimiento al alumno, tutorías, agendas, videos producidos para el curso, amplia teoría… y todo esto con un profesorado de expertos difícil de igualar y en un cómodo formato semipresencial.

Formación Profesional, Universidad y Empresa. ¿En qué se diferencia este curso del resto que hay en el mercado? ¿Cuáles son los puntos fuertes de esta formación?

Sin duda, el desarrollo. FP++ parte de la base de introducir a la empresa en el desarrollo de los contenidos del curso y este punto es el más fuerte: poder contar con la empresa que vive el día a día de lo que ocurre en la industria de la música electrónica. Y, por supuesto, que los profesores son profesionales en activo en cada una de sus áreas.
  

Todo ello mediante unos softwares que ha revolucionado el mundo de la música electrónica… ¿qué tiene Ableton Live en Producción o rekordbox en el DJing que no tengan otros softwares y por qué se ha decidido enseñar a manejar este y no otros?

Es muy necesario ofrecer una formación con el material que más se utiliza en el sector porque así se aprende desde la realidad, con mayor compatibilidad, para lograr una excelente competitividad y poder igualar los mismos objetivos de los profesionales. Usar las mismas herramientas te aproxima a ellos. En la producción, Ableton Live es muy intuitivo, un estudio actual indica que es el software para producir más usado en la industria de la electrónica para crear música, los grandes productores lo usan. Su versatilidad con el Djing y en el Live da para mucho. Por ejemplo, David Guetta, Madeon, Skrillex o Diplo lo usan. Y respecto a rekordbox y rekordbox dj, es el soft DJ de Pioneer DJ donde todos los DJs lo utilizan para gestionar sus archivos de audio con la posibilidad de usarlo también para pinchar, es imprescindible para sacarle al 200% del rendimiento a las máquinas de Pioneer DJ.

El mundo de la producción musical ha evolucionado mucho en los últimos años. ¿En qué punto se encuentra el sector?

En el punto de ser imprescindible para poder situarte a un buen nivel artístico. Se exige a DJs para ser contratados por agencias de booking o management y saber producir para ser fichados por estas empresas. Por lo tanto, si sumas a la ejecución de pinchar, ser DJ, hacer tu música y ser editada por sellos, se cierra un círculo imprescindible en la carrera artística. El nivel es bueno, está en un momento muy dulce.

¿En qué se diferencia un DJ de hace 10 años a la figura en la actualidad?

En la inclusión al 200% de la tecnología y la administración de su carrera artística, en buscar elementos para ser lo más genuino posible y tener ese efecto diferenciador. El fondo y los valores siguen manteniéndose, aunque siempre hay que actualizarse. Pero la gran diferencia está en la espectacularidad de la ejecución y en cómo la tecnología te hace lucir y ser mejor DJ.

¿Las nuevas plataformas de streaming, como Spotify, están cambiando las reglas de juego del sector?

Para el usuario de a pie sí, pero el DJ y el productor está más atento a otras plataformas como Soundcloud, Mixcloud o Hear This. Spotify es importante para escuchar el resultado final, es como la radio pero a tu gusto.

Y en todo este cambio la formación juega un papel esencial. ¿Se demandan más que nunca profesionales cualificados y con la formación adecuada?

Es totalmente imprescindible ya que la fuerte competitividad en la actualidad te hace estar mejor formado en muchos ámbitos profesionales, incluso hasta para subir contenidos a las redes sociales. Y sí, es cierto que el empresario prefiere un profesional que venga con formación especializada que al autodidacta. El que se forme tiene ventaja.

Háblanos de tu experiencia y cómo la has plasmado en el diseño de contenidos de este curso.

Llevo 33 años de profesión creando muchas cosas, muchas de ellas nuevas en el ámbito del DJ en nuestro país. La constante evolución de la profesión me apasiona y nunca he dejado de estar al día, por ello también soy trainer de Pioneer DJ en España. Por ello, el diseño de este curso ha sido un desarrollo desde el conocimiento, desde la actualidad de la profesión, de dar y ofrecer lo que intuyo siempre necesita el aspirante, de enseñarlo con pasión y comunicación natural. Sobre todo, enseñando desde el conocimiento real, ayudando a difundir qué es ser DJ hoy en día.

Contamos en el diseño de contenidos del curso con Plastic Academias, sois todo una referente en el sector. ¿En qué va a ayudar a los alumnos que se cuente con profesionales como vosotros del sector?

La experiencia de 25 años formando a DJs y Productores junto a nuestra metodología de enseñanza y aprendizaje, son una garantía.  

¿Qué le dirías a los alumnos para animarlos a comenzar este curso?

Que lo más importante sea la pasión por la música. Que lo que van a aprender se centra en lo que ellos aman, quieren y desean. Nosotros les ayudaremos a llegar donde necesitan para empezar, respondiendo todas sus dudas, junto a su implicación, actitud y aptitud.

¡Gracias por tu tiempo, Jordi!